Game over, culpabilidades
Tenemos tendencia a guardar mucho más en nuestra memoria los errores que los aciertos en nuestra vida. Así vamos cargando nuestra mochila interna de defectos, errores, tonterías. De circunstancias que por no haber sido analizadas o maduradas entran a formar parte del saco de los reproches.
La idea de hoy es que liberemos de los sentimientos de culpabilidad, ya que nos impiden seguir avanzando por el peso que arrastramos. Para ello, te voy a pedir que enciendas una vela blanca (si la tienes a mano) imaginando que la habitación donde estás se llena de luz. A continuación deberás repetir esta simple fórmula: decreto que me libero de todos mis sentimientos de culpabilidad y para ello pido perdón a todos los que haya ofendido consciente o inconscientemente ahora o antes, al tiempo que perdono a todos los que me hayan ofendido consciente o inconscientemente ahora o antes y, además, me perdono a mí por todos los errores que pueda haber cometido consciente o inconscientemente ahora o antes. Que así sea.
Repite estas frases tres veces consecutivas. Lo ideal sería que este ejercicio lo ejecutaras durante 9 días. El objetivo es que tomes consciencia de que tienes cosas negativas guardadas que te limitan y seas capaz de aceptarlas, pedir perdón, perdonar y perdonarte para liquidarlas. De esta forma te liberarás de tus cargas, puesto que cuando lo inconsciente se vuelve consciente, deja de tener un peso importante en tu vida porque ya lo has asumido, ya has extraído la parte de experiencia necesaria en toda acción y, por lo tanto, su función ha concluido. Es como si jugaras al escondite: cuando encuentras tus culpabilidades, se acaba el juego.
¡Apasiónate, vive, cambia!
Silvia Llop, psicóloga (col. núm. 20495)
[…] Game over, culpabilidades […]