Aprendizaje consciente
Aprender es la sal de la vida, es lo que nos mantiene en movimiento, en cambio constante. También logra que nuestro cerebro inicie nuevas conexiones neuronales, lo que lo impulsa a funcionar. Desde que nacemos (incluso desde antes) empezamos a adquirir conocimientos. Algunos los retendremos para toda la vida y otros quedarán escondidos en algún recóndito rincón de nuestro ser.
El ejercicio de hoy es muy fácil y también bonito. A partir de hoy, intenta aprender cada día algo nuevo conscientemente. Y la clave está en esta última palabra, ya que todos los días aprendemos montones de cosas, pero la gran mayoría nos suelen pasar desapercibidas. Plantéate el aprendizaje como una actividad más y anota todas las cosas que aprendas cada día, o las que más te interesen. De este modo estarás trayendo estos nuevos recursos a la consciencia y te serán mucho más fáciles de retener y aplicar cuando la ocasión lo requiera. Además, si ves físicamente (escritas en un papel) la cantidad de cosas nuevas que vas aprendiendo cada día, eso reforzará tu autoestima porque descubrirás que sabes mucho más de lo que crees, ya que no dejarás que los nuevos conocimientos pasen desapercibidos, sino que los estarás reteniendo y reforzando.
¡Apasiónate, vive, cambia!
Silvia Llop, psicóloga (col. núm. 20495)
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